Esta “bonita” oruga se caracteriza por tener unos “pelos urticantes” en los que se encuentra un tóxico bastante fuerte. Los cientos de miles de pelillos que cubre la piel del insecto tienen forma de flecha con forma de anzuelos y son disparados cuando el insecto se sienta amenazado. Esos pelos, invisibles al ojo humano, son capaces de penetrar fácilmente la piel humano o animal, entrar en los ojos o las vías respiratorias. Los pelos emiten una proteína (thaumetopoiene), a la cual el cuerpo reacciona con la producción de histamina. En el fondo es una reacción alérgica a gran escala que llega a producir necrosis de los tejidos afectados.
Las podemos encontrar en pinares y zonas boscosas de coníferas, pero también en los parques y jardines, caminando en hilera o en “procesión” una detrás de otra, lo que llama la atención de nuestros perros, que suelen ir a oler y a veces las lamen o incluso las comen, de ahí que la mayoría de las lesiones se produzcan en las patas, nariz, belfos (labios) interior de la boca y sobre todo en la lengua, ya que al picarles se lamen, clavándose esos pelillos que a lo mejor solo tenía en una pata y que ahora afectan a la lengua o incluso la garganta.
Una vez que veamos una reacción eritematosa en nariz o labios (granitos con rascado, o sea, el animal se pasa las patas obsesivamente por el hocico) lo más importante es lavar abundantemente la zona afectada al chorro de agua templada, si es posible, ya que el calor desactiva la toxina, ojo que no queme y nunca frotar, ya que si frotamos rompemos y clavamos más los pelillos de la oruga y liberamos más toxinas. Enjuagar la boca con agua abundante y explorar el estado de la lengua y de la respiración, si la lengua esta afectada o respira con dificultad llamar o acudir rápidamente al veterinario, se trata de una urgencia veterinaria y la vida de tu mascota corre peligro.
Aunque los gatos pueden verse afectados, son principalmente los perros , con su temperamento juguetón, los que tienden a sentirse más atraídos por estas pequeñas criaturas rastreras. El hocico y la boca son los más afectados. Sin embargo, debido a que los pelos urticantes son muy volátiles, no es inusual que otras partes del cuerpo se vean afectadas (por ejemplo, los ojos y los párpados ). Si se produce una ingestión, también se puede dañar el tracto digestivo
Síntomas en perros y gatos
Hocico y boca
Además del dolor causado, habrá una inflamación significativa visible alrededor de la boca y el hocico del animal. La necrosis de la lengua se puede desarrollar rápidamente e incluso podría hacer que algunas partes se caigan, privando al animal de comer adecuadamente.
Piel
El contacto con la piel del perro o del gato provocará una erupción agresiva con múltiples manchas rojas . A menudo también se presentan picazón e hinchazón en el área afectada.
Ojos
El hecho de que estos pelos urticantes puedan dañar gravemente los ojos , cualquier contacto con los ojos es muy peligroso y muy doloroso para el animal. Además, los pelos pueden causar inflamación de la conjuntiva y la córnea dando lugar a úlceras corneales. Si no se tratan adecuadamente, incluso pueden causar una pérdida total de la vista.
Así, que en esta época primaveral del año intenta evitar los bosques de coníferas, jardines con árboles, o zonas donde hayan sido “atacados” otros perros por esta oruga, que, aunque tiene su función en la naturaleza son un peligro muy real para nuestras mascotas, ante la duda mantén a tu perro cerca de ti sujeto con una correa y estate atent@ a lo que huele y come tu perro.